Café de la Casa Municipal

La Casa municipal es donde los arquitectos, pintores, mosaiquistas, estucadores y otros decoradores han producido una de las obras cumbres y símbolos del art nouveau en las tierras bohemias.

La prodigalidad de colores, la riqueza de los materiales, la decoración fastuosa y la extraordinaria explosión de la naturaleza nos deslumbran en cada uno de sus espacios y salas, incluyendo su renombrado café. La Casa municipal es un regalo que los checos se dieron a comienzos del siglo XX. La famosa construcción multipropósito fue edificada intencionalmente en las narices de los alemanes que llenaban la calle Na Příkopě, puesto que representa los ideales nacionales checos, burgueses y democráticos.

Este edificio, orgullo de la nación y amado por todos, continuaba siendo visitado incluso bajo el yugo comunista. Un poco deteriorado por el paso de los años, estuvo en total renovación después de la Revolución de terciopelo y recuperó su brillo característico. Hoy en día, la Casa municipal reluce como una joya del art nouveau, exactamente como cuando la inauguraron.

Tenemos que reconocer que ahora son los turistas mayoritariamente quienes visitan su café. Sin embargo, esto no hace que el lugar sea menos fascinante. Al fondo del gran salón donde brillan de nuevo miles de luces de estilo art nouveau, la ninfa en mármol de Carrara ha recuperado su lugar sobre la fuente iluminada.