Hotel Klárov ****

Este pequeño y encantandor hotel de 25 habitaciones está ubicado en el barrio Malá Strana – entre la Ciudad vieja y el castillo de Praga –, justo en frente de la antigua academia militar, hoy día sede del gobierno checo.

El concepto de este hotel boutique es rendir homenaje a músicos o cantantes célebres a través de cada una de sus habitaciones: desde Andrea Bocelli hasta Beyoncé, pasando por Bob Dylan.

En cuanto a la decoración, todas las habitaciones están decoradas al mejor estilo escandinavo con una pincelada original: un toque de color vivo, como el fucsia o el turquesa. En los baños encontraremos productos cosméticos como jabones, geles de ducha y champús de la marca francesa L’Occitane. Un toque francés que muchos sabremos apreciar, ¡sobre todo si somos adeptos a la marca!

Dentro del hotel hay un pequeño remanso de paz: un encantador patio interior donde podremos desayunar con toda la calma del caso en verano o simplemente disfrutar de un momento de descanso en el bar. Durante el invierno, la sala de descanso se encuentra a nuestra disposición durante todo el día y la noche; encontraremos allí cómodos sillones, una televisión y material de lectura.

Las mejores habitaciones de este establecimiento, como la Deluxe o algunas de las suites, cuentan con una magnífica vista del castillo de Praga gracias a sus grandes ventanas.

Este pequeño hotel, familiar y amigable, es el espacio ideal para un fin de semana en Praga. El único inconveniente, aunque mínimo, es que solamente las habitaciones de la última planta tienen aire acondicionado.